domingo, 28 de junio de 2009

El sexo, breve ensayo sobre el tema.

El otro día me reuní con una amiga de toda la vida que hacía tiempo a la que no veía. Cómo no, salió el tema del sexo, algo tan habitual entre nosotras que supongo que sería extraño no conversar sobre ello.

Sí, el sexo. Creo que para mí nunca fue un tema tabú, aunque siempre tuve pensamientos y sensaciones encontradas sobre él. Eso también depende de las experiencias que haya tenido cada uno. Al principio lo consideraba como algo adicional, por ejemplo, a una relación. Como un material extra, un bonus, un bonus importante pero al fin y al cabo un bonus. Pasó el tiempo, y entonces pensé en el sexo como algo necesario, como algo que tenía una importancia, pero una importancia que no había que sobrepasar.

Sin embargo, cuanto mayor me hago, más pienso y trato de evaluarlo. Creo en el sexo como tal, como una diversión, como algo básico entre la raza humana, y sobre todo en alguien de mi edad. El sexo es un ente en sí mismo, no tiene por qué ir ligado al amor, siempre y cuando se haga de manera respetuosa. Supone una diversión. Pero si sexo y amor se compajinan el uno al otro, puede resultar ser una gran forma de comunicación. Si además hay complicidad, puede conllevar diversión, comunicación y experiencias totalmente nuevas.

Siempre me gustó innovar, creer en las posibilidades de lo que podía ofrecer a otra persona. Sin embargo, muchas veces somos egoístas en este aspecto (como en tantos otros). Como en una relación normal, siempre es reconfortante el hecho de ofrecer algo a la otra persona. Por ejemplo, en una relación ofrecemos cariño, comprensión, tiempo... Pero con el sexo es lo mismo, ya que esperamos que el otro nos ofrezca estas u otras cosas a nosotros también.

Creo en el sexo como lo que es a fin de cuentas, pero también como algo más. Algo más que un "pasatiempo" o una "necesidad". Puede llegar a ser casi un arte. Si se hace bien, reconforta y aporta sensaciones nuevas. Es como experimentar con el cuerpo ajeno, y el propio supongo. Si tenemos un cuerpo, y una racionalidad que nos hace diferentes al resto de animales, es lógico que utilicemos esa racionalidad para buscar la forma de exprimir o aprovechar ese cuerpo, que tanto desconocemos. La innovación muchas veces es necesaria, por lo menos bajo mi punto de vista.

Si unimos sexo con amor, entonces también tendremos que sumar a la fórmula la palabra "comunicación". La comunicación en pareja es imprescindible para descubrir los entresijos de cada piel, de cada gusto, de todo lo que quiere y satisface al otro. Por supuesto, también para expresar lo que nos gusta a nosotros, y la forma de hacerlo. El tiempo de conversación es importante, también lo es el tiempo que dedicamos a satisfacer a los demás (ya que muchas veces es necesario tomarse un tiempo para las caricias, los preliminares, el acto sexual en sí, etc).

Debemos desprendernos de los tabúes y de la vergüenza cuando lo practicamos. También en general, es decir, al hablar del tema con otras personas. Mis amigos y yo solemos tener conversaciones sobre el tema, lo que, al ser chicos y chicas, da la oportunidad de conocer lo que le gusta al otro sexo si es que no lo sabemos. Me parece sano hablar de estas cosas, también dar consejo si te lo piden. Mucha gente que lleva años en una relación quieren innovar y no saben cómo, en ocasiones me preguntan y es un orgullo para mí dar consejo o aportar nuevas ideas, al igual que recibirlas.

En conclusión, que el sexo debe verse como algo natural, ya sea cuando lo practicamos como cuando hablamos de ello. Los tabúes y la verguenza pueden ser obstáculos que impidan mejorar nuestras relaciones sexuales, y es importante establecer una línea de diálogo con nuestra pareja, si la tenemos. Si no la tenemos, también hay que disfrutar del sexo como tal, siempre con precaución y respeto al otro, ya que puede ser algo divertido y saludable se haga con quien se haga(y no me refiero a los gustos de cada uno, sino a hacerlo con alguien con quien no se tiene una relación, cosa que no es imprescindible porque el sexo es sexo al fin y al cabo). Disfrutemos de lo que nos pueda ofrecer nuestro cuerpo y el ajeno también.

Nota al lector: con esto no quiero incitar a la promiscuidad ni a los hábitos que puedan herir a la persona ajena, sino hacer ver que el sexo es un tema como cualquier otro y debe tratarse tanto como comunicativamente como en su practicidad, que para eso está. ¡Saludos!

1 comentario:

  1. El sexo en si es simple es como una montaña rusa, el sexo y el amor conjugados son la experiencia mas fantastica de comunicacion, de codigos, de secretos, de intimidad, de pasion, de locura y podria seguir todo el dia, pero cada uno debe experimentarlo por si mismo.
    Buen ensayo, claro y simple .
    Sigo por aca tambien, permiso.

    ResponderEliminar